5 cosas que debes considerar antes de jubilarte
Las 5 cosas que debes considerar antes de jubilarte o vender tu negocio.
No importa cuánto les gusten sus negocios, llega un momento en el que los propietarios de negocios empiezan a pensar cómo y cuándo se jubilarán o venderán sus negocios por otros motivos.
Por lo general, esto ocurre después de muchos años en los negocios, pero no siempre es así. Muchos propietarios implementan un plan para cerrar, vender o traspasar incluso antes de abrir sus puertas. Independientemente de si has gastado años de sangre, sudor y lágrimas en tu negocio o si acabas de empezar, estas son 5 cosas que debes considerar al formular tu plan de traspaso, cierre o venta.
"El traspaso" es una serie original de Chase que tiene como objetivo ayudar a los propietarios de negocios a pensar más estratégicamente sobre la planificación de sucesión.
1. Determina el valor de tu negocio
Lo que vale tu negocio para ti suele diferir de lo que vale para otra persona. Para asegurarte de no sobrevalorar o infravalorar el precio de tu negocio, es posible que quieras obtener una valoración formal de una compañía de especializada en valoración de empresas, un corredor de bolsa o una firma asesora de fusiones y adquisiciones. Aunque es probable que haya que pagar un cargo, este servicio podría ahorrarte dinero a largo plazo al ayudarte a determinar una valoración realista para tu negocio y agregar credibilidad al precio para los posibles compradores.
Hay muchos factores en la valoración de un negocio, incluyendo los ingresos, los activos y las ventas comparables recientes (también conocidas por la abreviatura “comps”), de negocios similares en tu área. Además de estos artículos cuantificables, muchos compradores potenciales también valorarán la escalabilidad, la fortaleza de gestión, el liderazgo del mercado y la concentración de clientes de un negocio. Ten en cuenta las valoraciones fluctúan con el mercado, así que usar una valoración de hace una década, o incluso de un año, puede no ser una representación precisa del valor actual de tu negocio.
Los propietarios de negocios a menudo piensan en traspasar, cerrar o vender cuando el negocio está en su punto más bajo. Pero cuando se trata de una valoración, si es alta, también se considera vender.
2. Pon tus documentos en orden
La mayoría de los propietarios de negocios no se despiertan una mañana y dicen: “Voy a vender mi negocio hoy”. Aparte de ser una decisión importante, toma tiempo reunir lo que se necesita. ¿Sabes dónde están todas esas declaraciones de impuestos y esos estados de resultados que tu contador te dijo que guardaras? Bueno, es hora de sacarlos.
Independientemente de lo mucho que les gustes tú y el negocio a los posibles compradores, querrán ver un comprobante de su rendimiento. Es común que los compradores soliciten 3 de 4 años de declaraciones de impuestos del negocio, estados de resultados y balances generales, así como cualquier proyección futura.
Si tienes estos artículos disponibles, te felicitamos. Si no, te puede tomar un tiempo reunirlos. En cualquier caso, una vez que tengas todo, siempre es una buena idea revisar todos los documentos con tu contador u otros asesores.
Si estás incluyendo muebles, equipos o inventario en la venta, también tendrás que proporcionar una lista de estos artículos al posible comprador. Muchos compradores también querrán ver copias del valor de un año de gastos de servicios públicos, equipos y otros gastos recurrentes para que puedan comprender las fluctuaciones estacionales y planificar por adelantado.
Dependiendo del tipo de transferencia de titularidad, es posible que también quieras crear un plan de sucesión sobre cómo quieres que continúe el negocio. Esto es especialmente importante si estás pasando el negocio a un familiar y quieres que retenga los mismos valores e integridad que infundiste a tu negocio.
3. Prioriza tus opciones de salida
Los socios pueden ir y venir. Tu familia puede crecer. Un competidor podría querer comprar tu negocio de repente. Sea cual sea el motivo, tu plan de traspaso, cierre o venta del negocio puede cambiar con los años. Por eso es importante comprender tus opciones para el traspaso, el cierre o la venta de tu negocio:
- Transfiere la titularidad dentro de la familia: Una ventaja de tener a un familiar como sucesor es que a menudo comprenden lo que implica el negocio y pueden prepararse con el tiempo. También es una excelente manera de continuar con el legado que construiste o heredaste y conservar los valores y el nombre de la familia.
- Véndelo a compradores nuevos: Esta estrategia de salida es probablemente la que más personas piensan al vender un negocio. Vendes a nuevos compradores y puedes o no tener una participación después de la venta. Esos detalles se resolverán durante la negociación del contrato.
- Vende tus acciones a socios existentes: no es raro que los socios compren entre ellos.
- Ofrece a los empleados un plan de compra o de propiedad de acciones para empleados: Tus empleados son los activos más importantes del negocio de activos y, a menudo, también están interesados en comprar.
- Considera una fusión o adquisición Cuando 2 negocios comparten las mismas ofertas, metas u objetivo de mercado, no es inusual que uno quiera fusionarse o adquirir el otro.
- Cierra y liquida tus activos: Si quieres reducir todos los lazos con tu negocio, esta opción no deja lugar a la interpretación. Una vez que vendas todos los activos y liquides cualquier deuda y les pagues a los socios/accionistas, listo. Pero una cosa para tener en cuenta es el efecto sobre los empleados, clientes, proveedores e incluso tu comunidad.
4. Piensa en cómo te pagarán
¿Cómo te das cuenta del valor que has creado? Hay una variedad de maneras de obtener una compensación por la venta de tu negocio. Ten en cuenta que cada una tiene diferentes implicaciones impositivas. Independientemente de la forma que escojas, siempre es importante buscar el asesoramiento de un abogado, contador y asesor financiero.
- Efectivo: Como bien sabes, nada está garantizado en los negocios (o en la vida). Un pago total en efectivo por adelantado garantiza que recibas el dinero, sin depender del éxito o de las ganancias futuras del negocio que acabas de vender.
- Financiación del vendedor o pagaré del vendedor Cuando financias la totalidad o una parte del trato tú mismo, puedes abrir un nuevo grupo de clientes potenciales que no pueden pagar el total por adelantado en un pago único y no califican para préstamos tradicionales. Esta opción podría liderar un flujo de ingresos continuo para ti que incluye pagos e intereses.
- Ganancias: Con esta opción, aceptas un precio más bajo en la venta de tu negocio a cambio de una disposición que te compensa financieramente (generalmente un porcentaje de ganancias o ventas) si el negocio cumple con ciertas metas en el futuro.
- Acciones: Esta opción es para corporaciones C o S (o LLC tributables como C o S) que pueden comprar y vender acciones. Los detalles de la transacción pueden variar durante la negociación del contrato.
- Oferta de empleo: Esta opción puede ser beneficiosa para todos los propietarios que ya no quieren la responsabilidad de administrar el negocio, pero no están listos para jubilarse y los compradores que podrían usar un poco de ayuda para ponerse al día.
5. Prepárate psicológicamente
No importa cuánto estrés, frustración o insomnio te pueda causar tu negocio, sigue siendo tu bebé. Decidir dejarlo atrás nunca es una opción fácil. Además de prepararte financiera y operativamente, también debes prepararte mentalmente para este próximo capítulo. Un poco de planificación puede ser de gran ayuda.
Piensa en lo que harás con tu tiempo. Habla con personas que han estado allí y lo han hecho. Planifica un viaje. Empieza ese proyecto que has pospuesto. Y antes de firmar los documentos finales, piensa si quieres mantenerte aún ligado de alguna forma. Lee la serie de Chase for Business "El traspaso" para obtener información y sugerencias sobre planificación de sucesión.