Empieza de a poco y crece rápidamente

Antes de abrir su propio negocio, David Habib se pasó años trabajando largas horas en un puesto corporativo en Washington, D.C. Solía llegar a su casa cansado y con hambre, solo para sentirse abatido en el momento de abrir la nevera. No quería pasarse horas en la cocina preparándose la cena, pero tampoco quería renunciar a una comida rica o nutritiva.

Fue justo entonces cuando se le prendió el bombillo. Debía de haber muchas personas como él, gente que valorara una comida saludable y casera, pero sin el tiempo suficiente como para preparársela por sus propios medios. Pensó que les interesarían las salsas y aderezos hechos a base de ingredientes frescos y naturales, y que pudieran incorporar fácilmente en recetas sencillas. Así pues, decidió empezar a vender las suyas propias bajo el nombre de Yo Mama’s Foods, en honor a su madre y su deliciosa cocina.

La empresa no tardó en convertirse en un éxito. El año pasado, cuando escribimos por primera vez sobre Habib, los productos Yo Mama’s estaban disponibles en 11,000 tiendas. Ahora Habib nos dice que sus productos están en 24,000 tiendas por todo el mundo, y sigue sumando. “Nuestro objetivo es continuar creciendo”, dice Habib. “Queremos ser una marca doméstica internacional”.

Enfrenta cada contratiempo como si fuese una oportunidad

Yo Mama’s ha crecido tan rápido debido en parte a que Habib ve cada contratiempo en su negocio como si se tratara de una oportunidad. Antes, por ejemplo, la compañía se traía el vidrio desde Taiwán. Pero cuando las costos de los fletes se dispararon como consecuencia de los problemas en la cadena de suministro, aprovisionarse de vidrio en el extranjero se hizo demasiado costoso.

Así que Habib decidió reorganizar su cadena de suministro y empezó a buscar socios que tuvieran sede en EE. UU. “Empezamos a llamar a las puertas de algunos de los mayores fabricantes”, dice. Con el tiempo se puso en contacto con empresas estadounidenses que proveían de vidrio a una gran cantidad de marcas importantes. “Tener ahora la oportunidad de trabajar con compañías de EE. UU. nos ha permitido obtener mejores materiales, comprarlos aquí en EE. UU. y, en definitiva, obtenerlos al mejor precio”.

A Habib nunca le ha dado miedo hacer cambios en su oferta de productos o en su estrategia comercial. De hecho, él ve la inflación como una motivación más para asegurarse de que la compañía cuente con "la gestión más eficiente y optimizada posible".

“Desde el principio, hemos estado haciendo algo llamado ‘tercerización’, donde nosotros nos hacemos cargo de la relación con todos los proveedores, y luego el fabricante es responsable únicamente de producir y envasar”, dice Habib. “Esto nos ha permitido aumentar nuestro poder de compra, desarrollar nuestra relación con los proveedores desde el primer momento y crear una base sólida con la que poder ampliar el negocio”.

Diversifica tus proveedores

Otro componente del éxito de Yo Mama’s es la proactividad de Habib. No se queda esperando a que le lluevan oportunidades del cielo; él las busca.

Veamos un caso en concreto. Cada año, su equipo emplea millones de libras de tomates en la elaboración de sus salsas. Sin embargo, dado que gran parte de los tomates en EE. UU. se cultivan en California y Yo Mama’s tiene su sede en Florida, Habib se vio en la situación de tener que transportar sus tomates de costa a costa para poder procesarlos.

Esta situación logística resultó ser un problema… y una oportunidad. El equipo de Yo Mama’s empezó a buscar otros lugares donde comprar tomates. “Nos enteramos de que, en el estado de Florida, cada año se tiran 800 millones de libras de tomates roma”, dice Habib. “Se los llevan a los campos y dejan que se pudran”.

La última vez que entrevistamos a Habib, él y sus trabajadores ya habían empezado a rescatar parte de estos excedentes de tomate roma, tras cerrar un acuerdo con un proveedor local. Desde entonces han ido incorporando estos tomates locales en sus recetas y han realizado catas con regularidad, para así asegurarse de que el nuevo producto siga siendo igual de fresco y sabroso que el original. Estas nuevas salsas servirán para reducir la huella de carbono de la compañía y recuperar millones de libras de tomates frescos.

Define tu estrategia de gasto

El empeño de Habib por aprovechar las oportunidades se aplica también a su manera de financiar el negocio. Al haber estado usando una tarjeta de crédito de Chase para sus gastos personales, cuando llegó el momento de elegir una tarjeta de crédito para su negocio, Habib recurrió nuevamente a Chase.

“Fue Patrick, el de nuestra sucursal de Chase, quien realmente asumió un riesgo con nosotros”, dice Habib, que se puso en contacto con él poco después de haber lanzado Yo Mama’s. “Éramos una empresa muy pequeña, y yo fui y le pedí una línea de crédito, y probablemente fuera sensato por no dárnosla en aquel momento. Pero él me dijo: ‘¿Sabes qué? Si contratas una tarjeta para negocios, te podrá dar reembolsos de dinero’”. Así pues, Habib solicitó su tarjeta y lleva usándola desde entonces.

Poco después, Habib también se hizo con una tarjeta Chase Ink Premier. “No nos hacía falta otra tarjeta de crédito, pero cuando vimos que Chase ofrecía la oportunidad de acumular un [2.5%] de reembolso de dinero en compras superiores a $5,000, nos decidimos al instante”, dice. A Habib le resulta muy útil la función de reembolso de dinero de la tarjeta, sobre todo a la hora de comprar materias primas y otros artículos al por mayor.

“Creo que lo que hace que Chase sea la opción ganadora para nosotros es la experiencia como usuario y como cliente”, dice. “En general, los beneficios de reembolso de dinero están muy bien pensados”.

No pares de crecer

Habib está contento con el éxito actual de Yo Mama’s Foods. Pero su intención es seguir en busca de oportunidades para mejorar su negocio. “Nuestra meta es ser un nombre conocido en los hogares”, dice.

¿Y cómo tiene previsto alcanzar esa meta? Siguiendo el mismo plan que le llegó hasta ahora: pensando a lo grande, empezando de a poco y aumentando rápidamente.

“Si eres capaz de ejecutar bien a pequeña escala, entonces estás en buena situación para acabar expandiéndote a gran velocidad”, explica. “Y al crear el mejor producto mediante una combinación de sabor, diseño y rentabilidad, a medida que sigas creciendo irás ganando impulso de manera natural, como una bola de nieve”.

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