En algunos casos, las consecuencias del robo de identidad pueden ser tan simples como hacer algunas llamadas a las agencias de informes de crédito. En otros, puede convertirse en un proceso complicado y elaborado que puede tomar años en resolverse, incluso si sigues todas las reglas para reportar el delito y contactar a los acreedores. Si te encuentras en esta situación difícil, estos consejos prácticos sobre qué hacer y qué no hacer te pueden ayudar a manejarla.
Tiempo de recuperación
Los costos del robo de identidad pueden incluir gastar cientos de dólares y horas de tu tiempo intentando limpiar tu historial de crédito. Es posible que los recursos para ayudarte estén disponibles sin cargo a través de tu banco. Sin embargo, involucrar asistencia adicional más allá de tu banco puede aumentar significativamente el costo de la recuperación por robo de identidad.
Lo que deberías hacer: tomar medidas de inmediato
- Prepárate con la siguiente documentación:
- La denuncia policial presentada cuando te enteraste del robo de identidad.
- Robo de identidad: Un plan de recuperación, la guía de la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés) para víctimas de robo de identidad, incluyendo listas de tareas, formularios y cartas de muestra.
- Copias de tu informe de crédito.
- Documentación de acreedores, como copias de la solicitud de crédito completada por el ladrón.
- Presenta una denuncia a la línea directa de robo de identidad de la FTC llamando al 1-877-IDTHEFT (1-877-438-4338). Además, asegúrate de poner una alerta de fraude en cada una de las 3 agencias de informes de crédito principales (TransUnion, Equifax y Experian). Aunque las alertas de fraude están diseñadas para que los prestamistas se comuniquen contigo antes de emitir un nuevo crédito en tu nombre, ten en cuenta que no siempre funciona y, a veces, los delincuentes aún pueden abrir cuentas nuevas.
- Envía copias de la denuncia policial a todos tus acreedores para anticiparte a las iniciativas de cobro enviadas a una dirección incorrecta. Si sigues tratando con agencias de cobro agresivas que se niegan a creer que la deuda no es tuya, comunícate con tu prestamista para avisarle de esta experiencia.
- Asegúrate de mantener un registro de todos tus esfuerzos: escribe la fecha y la hora, con quién hablaste y qué discutiste.
Lo que no deberías hacer:
- No pagues ninguna factura o deuda que sea resultado de fraude.
- No cubras ningún cheque que se haya emitido o cobrado de forma fraudulenta.
- No te declares en quiebra sin consultar con un profesional.
- No cambies tu número de Seguro Social (a menos que el Seguro Social te indique que lo hagas, un evento poco frecuente).
- No te dejes intimidar por pagar ninguna deuda en la que no hayas incurrido.
Ser proactivo es fundamental para una recuperación rentable. Sentir una variedad de emociones está bien, pero no dejes que eso te impida actuar y poner medidas de seguridad para salir adelante. Considera buscar asesoramiento o unirte a un grupo de apoyo local para que puedas hablar con otras personas que puedan estar atravesando una circunstancia similar. Usa los recursos disponibles para ti a través de tu banco. Ten confianza en que es posible recuperarte del robo de identidad.