Cómo dominar el lenguaje corporal digital y triunfar en el actual entorno de negocios por Internet

¿Quiénes son?

Durante los últimos 10 años, mi pasión personal, libros, investigación y consultoría a propietarios de negocios se ha enfocado en una pregunta: ¿Cómo podemos conectarnos de manera más inteligente en el mercado actual con clientes, empleados, socios y otras partes interesadas?

He viajado por todo el mundo trabajando con empresas, pequeñas y grandes, para reinventar cómo impulsan las ventas, impulsan la fidelidad del cliente y mejoran la participación en cualquier momento y en cualquier lugar. Dondequiera que iba, seguían apareciendo las mismas preguntas: ¿Cómo puedo mejorar la forma en que nos conectamos con los clientes de diferentes edades y estilos de trabajo que rara vez se reúnen en persona y comunicarnos de manera efectiva? ¿Qué puedo hacer para que mis equipos se sientan conectados entre sí y con las personas de otros equipos? ¿Por qué parece infinitamente más difícil fomentar la confianza, el compromiso y la seguridad para tomar riesgos en un entorno digital? Y, por último, ¿por qué mis propias comunicaciones fallan a menudo, y producen consecuencias no deseadas y llenas de agitación?

Cuanto más trabajaba con mis clientes para resolver estos problemas, más evidente era que los causaban las mismas herramientas digitales que de tantas maneras nos habían liberado. Nuestra incapacidad para lidiar con los efectos secundarios de los cambios en la comunicación producidos por nuestras nuevas y brillantes herramientas digitales: email, mensajes de texto, PowerPoint, Zoom, crearon malentendidos generalizados, tiempo perdido y conflictos, que a su vez se manifestaron impactando a nuestros negocios.

Como investigadora, autora y oradora principal, me comprometo a ayudar a los líderes de negocios de todo el mundo a reimaginar la conexión con el lenguaje corporal digital en mente, impulsor fundamental para conseguir ventas y hacer crecer a los pequeños negocios en nuestro mundo moderno.

El origen de la pasión por este tema y su investigación

Cuando la gente me pregunta cómo empecé a hacer lo que hago, les digo que es una historia que ha durado toda mi vida. Como niña nacida de padres indios, estadounidense de primera generación, llegué al inglés de manera indirecta. Crecí en un barrio de clase media en las afueras de Pittsburgh. En casa, mis padres, ambos médicos que habían emigrado a Estados Unidos cuando tenían veinte años, hablaban hindi, y rara vez inglés.

Tanto mi mamá como mi papá dieron prioridad que mis dos hermanos y yo honráramos los valores y las costumbres tradicionales de la India. El silencio era una señal de respeto a los mayores, y escuchar era un rasgo preciado. Aprender inglés, tener un buen desempeño académico y casi todo lo demás quedó en un segundo lugar.

Atrapada entre 2 culturas, me metí hacia dentro. A menudo ni se sabía si yo estaba en la habitación. En la escuela era tímida, tranquila, más una observadora que participante. Levantar la mano o llamar la atención era inimaginable para mí. Como una niña que oscilaba entre el inglés de fuerte acento de mis padres y mi mal hindi, quería sentir que pertenecía a algún lugar, así es que desarrollé algunos trucos, uno de los cuales fue la capacidad de descifrar el lenguaje corporal de otras personas.

El lenguaje corporal me dio la clave para comprender los mundos extraños que me rodeaban. Me obsesioné con descifrar las señas y señales de mis compañeros de clase, sin importar lo sutiles que fueran; el tono, el ritmo, las pausas y los gestos. Las chicas populares caminaban con la cabeza en alto, los hombros hacia atrás, literalmente casi mirándonos al resto por encima del hombro. Los niños mayores mostraban su desinterés al encorvarse durante las reuniones escolares, sus ojos miraban al suelo o se miraban entre ellos, nunca al adulto que hablaba.

Mientras era una inmigrante que aprendía el lenguaje corporal tradicional cuando era niña, me di cuenta de que hoy todos somos inmigrantes que aprenden el lenguaje corporal digital en el mundo moderno. Durante los últimos años, he notado que los propietarios de negocios siguen teniendo dificultades: interminables llamadas de ventas, videochats llenos de momentos "Oh, no, ve tu primero", imágenes fantasma, respuestas de email que aparecen una semana después y herramientas digitales que generan más problemas de comunicación, angustia y confusión.

Parecía que el malentendido “lenguaje corporal digital”, o mejor dicho, la falta de un conjunto de reglas acordadas universalmente, estaba creando grandes problemas en todo el mundo: en empresas, comunidades e incluso familias.

Esto me puso en marcha. Durante la última década, he buscado crear un libro de reglas básico para comunicaciones claras en el mundo digital moderno. Comunicar lo que realmente queremos decir hoy en día requiere que entendamos las señas y señales a un nivel detallado mientras desarrollamos una mayor sensibilidad a las palabras, los matices, el subtexto, el humor y la puntuación.

Por qué este tema es fundamental para los propietarios de pequeños negocios

Las señales no verbales representan del 60 al 80% de la comunicación cara a cara. Los propietarios de pequeños negocios confían en el lenguaje corporal para conectarse y generar confianza. Pero como la mayor parte de nuestra comunicación ocurre detrás de una pantalla, las señales tradicionales del lenguaje corporal ya no son visibles. Aquí es donde el lenguaje corporal digital se vuelve importante.

El lenguaje corporal digital consiste en saber cuándo levantar el teléfono: un acto que vale más que mil respuestas a todos los emails. Es enviar emails de recapitulación rápida que resumen los puntos clave y las ideas, y confirmar los siguientes pasos dentro de los 30 minutos posteriores a una reunión, que es como el nuevo "apretón de manos virtual". Activa lo mejor de nuestro mundo digital para que las reuniones sean aún mejores. Por ejemplo, hacer que un cliente existente se una brevemente a un discurso de venta para un cliente potencial o mostrar videos cortos para mejorar una reunión en pantalla; es como la nueva hora del cóctel virtual. ¿Y cuando estás en esa reunión cara a cara? - Pon tu teléfono en ‘no molestar’ para no estar mirando tu pantalla cuando un cliente o empleado está intentando hacer contacto visual contigo.

Por qué es emocionante asociarse con Chase for Business

Imagínate después de dominar el lenguaje corporal digital: Puedes conectarte con potenciales clientes de ventas en cualquier momento y lugar, cerrar acuerdos y estás impulsando los ingresos hacia arriba y a la derecha en tu organización con rapidez y eficacia.

Mi meta es ayudar a los propietarios de pequeños negocios a mejorar su lenguaje corporal digital para impulsar las ventas, la fidelidad del cliente y el compromiso en el mercado del siglo XXI. Al brindarte las herramientas que necesitas para liderar con más competencia y confianza, y menos estrés y frustración, este contenido te ayudará a crear relaciones en cualquier momento, en cualquier lugar y en cualquier parte del mundo.

El lenguaje corporal digital es la clave del éxito en el mercado actual para los propietarios de pequeños negocios. Tengo muchas ganas de asociarme con Chase for Business para llegar a clientes en todo Estados Unidos.

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